jueves, 31 de enero de 2013

¿70 personas han movido el mundo?

-Y como te decía, ese conjunto que llevas es muy mono, pero no es todo lo fashion que debería, al contrario...
-Te voy a enseñar lo fashion que es mi naginata si sigues hablando de moda...
-¡El vinoooo que tieeeeneeee Asunción no es blanco, ni tinto, ni tiene colooooooorrrr! -cantaba Adrián.
-Me permito indicarles que he dejado limpio y reluciente el pasaje de la derecha, por si los señores prefieren no mancharse los pies...
-¡Oich! ¡Muy bien hecho, Ambrosio! ¡Vamos para allá!
-Este tipo debe tener poderes mágicos -murmuró Rebeca-. No es posible que una persona normal sea capaz de limpiar tramos de alcantarilla de la manera que lo hace él...
-¡Los borraaaaachooos en el cementeeeeeerioooooo...!

En el momento que Laurita, Adrián y Rebeca entraban en el pasaje de la derecha, se encontraron con un callejón sin salida.
Laurita se volvió:
-¡Ambrosio, tonto! ¡Has limpiado de más! ¡Aquí no hay salida!
-Lo sé, mi querida guarrilla -respondió el mayordomo.
-¿Qué?

Una pesada reja cayó desde el techo, aprisionando a los tres Sabios y dejando fuera del callejón a un Ambrosio que sonreía cínicamente.
-¡Ambrosio! ¿Qué significa esto? ¿Quieres que te despida? ¡Siempre creí que eras algo mejor que el proletariado medio, pero veo que estaba equivocada! ¡Sácame de aquí! ¡Ahora mismo!
-No -respondió el mayordomo.

La energía comenzó a crepitar alrededor de Laura.
-¡QUEMESAQUESDEAQUÍIIII!!!!

Y un enorme rayo de energía surgió de las manos de la niña hacia la verja... y se disipó en lucecitas inofensivas.
-¿Eh?
-Antimagia -explicó Ambrosio con una sonrisa-. Ninguno de vuestros poderes mágicos funcionarán aquí. Y la prisión es a prueba de las artes marciales de Rebeca. Está todo planeado.
-¿Quién eres realmente? -preguntó Rebeca.
-Podríamos decir que soy una Sanguijuela Mágica -respondió Ambrosio-. Durante años hice el papel de servidor en la casa de Laura, pero era porque sabía el potencial mágico de la criaja. Os he investigado a todos... y sé perfectamente como venceros y hacerme con vuestros poderes...
-¡Estás despedido!
-¿Por qué no nos has matado ya?
-¡Asuncióoooon!!!
-Porque muertos no servís de cebo para el resto. De quien sí me voy a ocupar ya es de Hambre. Tranquilos, es un asesino en serie y un auténtico cabrón. Así que se merece lo que le haga. Lástima que, con el tiempo, también tenga que haceros cosas parecidas a vosotros, a Raoul, a Fran, a Alba...

En ese momento, Ambrosio comenzó a sacar de sus bolsillos un montón de plantas y a colocarlas por todos los lugares de la cloaca.
-¿Qué es eso? -se extrañó Rebeca.
-Como os dije, sé como venceros a todos vosotros. Esto es hierba gatera. Tengo mis motivos.

Y después de dejar un montón de hierba gatera por todo lugar, Ambrosio se alejó en busca de Hambre, dejando a nuestras heroínas aprisionadas junto con un especialista en suerte... pero a quien la suma de la antimagia y la bebida, le habían provocado la mayor resaca que jamás un Sabio tuvo...

Continuará

martes, 29 de enero de 2013

69, el número que mueve al mundo.

-¿PERDER ENERGÍA? ¿DE QUÉ COÑO...?
-¿Perder energía? te juro que al menos hace un rato...
-¡Zoe! ¿es que no piensas sino en...?
-Anda que... ustedes dos, menudas pájaras...
-PUES SI, UNO HACIÉNDOSE ILUSIONES Y...
-¿Y tú de qué te quejas? si llevan horas echándote flores (por no decir otras cosas)
-PERO CUANDO HAS LLEGADO SE HAN PUESTO DE TU LADO ENSEGUIDA, Y A MI QUE ME DEN.
-Que no cariño que tu estás hecho para dar, no pa lo contrario
-Uys y tanto y tanto...
-¿Pero a ustedes dos que les pasa? ¡se supone que yo soy el bueno!
-¡Tú eres un pringao!- dijeron las dos al unísono.
-¿Ves?
-¿QUÉ QUIERES QUE VEA? TENDRÉ MI RATITO DE GLORIA, PERO EN EL FONDO SIEMPRE TERMINARÉ SIENDO AQUEL AL QUE TODOS DEJAN DE LADO.

y se alejó rápidamente, sollozando, intentando ocultar su cara para que no se le viera.

-Que poco tacto tienes ¿ves lo que has hecho?
-¡Pero si es el malo! ¡está destinado a matarme! ¡yo lucho por mi, claro, pero también por toda la humanidad! ¿eso no cuenta para ustedes?
-¡Insensible!
-¡Rácano!
-¡Capitán de las sardinas!
-¡Don nadie!
-¡Mequetrefe!
-¡hijodep.... ¡hay que decirlo más!
-Ya veo, ya. En fin, eso me pasa por intentar ayudar y trabajar en equipo. Ahí os quedáis.
-Ale, ya está el muy estúpido, vuelve a dejarnos a todos plantados y a ir a por Codicia, que es lo único que le importa. Yo yo yo yo yo, como siempre...
-¡Que os den!
-¡vale! digooo... ¿pero tú que te has creído?

En la distancia, Fran y Alba asisten a la escena sin saber qué hacer ni que pensar. Últimamente han visto muchas cosas que han acelerado muchas otras cosas en su interior y hecho brotar sensaciones y sentimientos hasta hace no demasiado extraños para ellos, y les han dado que pensar. Los peligros, han acentuado en ambos la necesidad de compartir su escaso tiempo, sus pocos momentos de tranquilidad e intimidad. Fran aprieta la mano de Alba con la suya y toma una determinación. Se miran a los ojos y piensan "huyamos de esta locura, aprovechemos para estar sólos  y decirnos todo lo que ahora callamos; la luz de la luna brilla para nosotros y el fuego de mis labios necesita ser encendido con los tuyos hasta que arda el corazón y la pasión que encerramos nos consuma hasta que de nosotros solo queden las cenizas". En realidad piensan: vamos a echar un kiki, pero lo adornan un poquito, que están empezando y todo hay que acaramelarlo un poco y todo eso. Así que Fran la cubre con su capa y de repente ya no están allí, sino en un lugar maravilloso y salvaje, completamente solos en un paisaje natural increíble en una playa de arena blanca y un mar en calma bañándoles los tobillos. El hecho de que estén sin ropa sorprende un poco a Alba al principio, quien tiene un asomo de timidez que pasa rápidamente mientras Fran se siente un poco avergonzado por su ocurrencia. Se abrazan tiernamente y se besan, y poco a poco la marea sube y sube, y los cubre de mojada calidez. La arena fría mancha sus cuerpos calientes, pero ellos ya no están en el mundo, ni siquiera están en el mundo inventado por Fran. Ahora están en otro sitio, más allá de todo, allí donde el tiempo es infinito pero siempre se hace corto.

lunes, 28 de enero de 2013

68 y me quedo a uno

Guerra se había lanzado contra Raoul, lanzándolo al suelo. Agarró del cuello a su enemigo y apretó cada vez más fuerte.
-¡Muere! ¡Muere!
Raoul sintió como su cuello se tensaba... no quedaba otra opción, debería recurrir a la legendaria nobleza y castidad del paladín.

En otras palabras, que hizo lo que Rebeca había ya convertido en un arte con él. Lanzó una patada que acertó de pleno en la entrepierna de Guerra.

El Jinete del Apocalipsis cayó sobre Raoul, gimiendo de dolor. Un grito histérico se escuchó por parte de Mel:
-¡No! ¡No le lastimes eso!

Raoul quiso soltar una maldición, pero su cuello estaba demasiado dolorido para obedecerle. Tanto él como su enemigo estaban agotados, vencidos... pero ambos dispuestos a seguir combatiendo.

Sin embargo, un montón de manos esqueléticas surgieron de la tierra y agarraron a ambos contendientes.
-Por favor, parad ya -dijo Alba.
-Yo no te pido la luna -asintió Arturo.
-Esto es una locura -añadió Fran-. Tiene que haber una manera de resolver...
-No, no la hay -le interrumpió Zoe-. Estoy recibiendo un mensaje telepático del profesor. Dice que los Jinetes están perdiendo su energía y pronto no serán una amenaza. El problema es que uno de los Doce Sabios se revelará como un traidor y su poder será mucho mayor que el de los Jinetes.
-¿Y quién es él? ¿En qué lugar se enamoró de ti? ¿De dónde es? ¿A qué dedica el tiempo libre? -la voz robótica de Arturo dio forma a lo que todos pensaban en ese momento.

Continuará

domingo, 27 de enero de 2013

67 y quedan dos para el número mágico

-TIENEN UN AGUANTE EXCEPCIONAL...
-Miau. Y eso que descubrieron sus poderes y apenas están entrenados sino desde hace una semana hasta ahora. Pero motivación no les falta.
-PUES LA VERDAD ES QUE LO ESTÁN DANDO TODO. NO RECUERDO CUANDO FUE LA ÚLTIMA VEZ QUE VI ALGÚN SABIO PELEAR CON TANTO AHÍNCO... ¿TE ACUERDAS DE PIERRE?
-Pues si. Creo que Peste había acabado con todo su pueblo, que él se había salvado porque había salido a la ciudad a vender una vaca o algo así. Ah, no, ya recuerdo, murió todo el pueblo menos su suegra, creo recordar.
-SE ENFADÓ LO QUE NO ESTÁ ESCRITO, CLARO. SI HUBIERA SOBREVIVIDO CUALQUIER OTRA PERSONA...
-Peste era un bromista... ah, los viejos tiempos...
-SI; AHORA NO ES MÁS QUE UN VULGAR ILUSIONISTA, UN TRAMPOSO. COMO BUEN TIBURÓN DE LOS NEGOCIOS, SOBREVIVE A BASE DE IMPONERSE SOBRE LOS DEMÁS, TENER MÁS INFLUENCIAS Y DINERO. DESDE QUE ALGO O ALGUIEN TIENE ALGUNA POSIBILIDAD DE DERROTARLO INTENTA ENGAÑARLO, CONVERTIRLO A SU CAUSA O LIQUIDARLO. LA OPCIÓN QUE MÁS LE GUSTA ES LA ÚLTIMA, MÁS RÁPIDA Y DA MENOS PROBLEMAS. PERO CON LA QUE MÁS DISFRUTA ES CON LA SEGUNDA.
-Interesante... menos mal que he enviado a alguien inteligente, incorruptible y con más experiencia que el diablo a por él.
-NO TE ESTARÁS REFIRIENDO...
-¿Si?
-TU SABES IGUAL QUE YO QUE ESTO DE LA LUCHA ENTRE EL BIEN Y EL MAL ES TONTERÍA, QUE ES POR DEPORTE Y DEMÁS.
-Claro, debo ser el único que sabe la verdad de entre los sabios, pero si se lo dijera a los demás todo dejaría de tener sentido.
-TAMBIÉN SABES QUÉ OBJETIVO TIENE NUESTRA LUCHA, PERO IMAGINO QUE DEL MISMO MODO ELLOS TAMPOCO LO SABEN.
-Creo que ya veo a donde quieres llegar... ¿Peste tenía mucha imaginación?
-NINGUNA.
-¿Insinuas pues que todo esto lo ha urdido Máximo cuando al fusionarse empezaron a compartir poderes y conocimientos para hacer que nos machacáramos los unos a los otros y hacernos a un lado para poder él hacer y deshacer a su antojo?
-COMPLETAMENTE.
-Si, ese cabrón ya estaba un poco pallá cuando estaba de nuestro lado (sólo hay que ver al hijo, buena pieza el muchacho, y eso que creo que dentro de lo que cabe ha salido decente y todo) imagino ahora, con poder casi ilimitado. 
-SI TE SOY SINCERO, ES COSA VUESTRA. NI YO NI LOS OTROS MUCHACHOS PODEMOS INMISCUÍRNOS. VA CONTRA LAS LEYES.
-En fin, odio tener que retirarme antes de saber quien de los dos gana la apuesta, pero estos no se cansan y yo tengo asuntos pendientes que resolver. Nos veremos cuando gane el señor médico.
-NI LO SUEÑES, EL MATA ES EL BUENO, ES DE LOS MÍOS HASTA DE APELLIDO. LE DARÁ SOPAS CON ONDAS A TU MATASANOS.
-Pensaba que te gustaban los matasanos.
-QUE VA, SE EQUIVOCAN DEMASIADO Y HASTA SALVAN A LA GENTE. NO MOLAN.
-En fin, cuídalos a ambos. ¡Hasta luego!
-SI, PORQUE GANE QUIEN GANE QUIERO VER UNA REVANCHA. NO ME LO PASABA TAN BIEN DESDE CUANDO PELEAMOS EN AQUEL VOLCÁN TAN GORDO.
-Es cierto. Lo recuerdo perfectamente... aquella lava ardiente, aquel ejército de esqueletos... lo de la hidra gigante de fuego fue impresionante ¡que buenos tiempos aquellos!
-SI, YA NO SE HACEN PELEAS COMO LAS DE ANTES...

sábado, 26 de enero de 2013

66 y me quedo a un 6 de que me llamen satánico

El anciano profesor de matemáticas sostuvo la mirada de Codicia. Extrañamente no había tenido problemas para llegar hasta él. Los guardaespaldas estaban ausentes, los robots parecían desconectados, las trampas mágicas desactivadas, el perro durmiendo, las cámaras apagadas... ¿qué estaba ocurriendo?

-¿Todo esto es parte de la trampa? -preguntó el anciano profesor.
La risotada histérica y megalómana de Codicia retumbó en la estancia atestada de obras de arte, lingotes de oro, cofres del tesoro y cheques en blanco. Cuando el Jinete del Apocalipsis comenzó a hablar, dos voces claramente diferenciadas se entremezclaban. Una era horrorosa y altiva. La otra era la de Máximo, el padre de Raoul.
-¿QUIÉN TE CREES QUE ERES PARA INTERRUMPIR... lo siento, viejo amigo... la infección de Peste es demasiado fuerte como... QUIERO TU MAGIA Y TU CUERPO, TU ESENCIA FORMARÁ PARTE DE MI COLECCIÓN Y TU CABEZA EN UNA PICA... estoy luchando continuamente contra la infección... pero sólo hasta ahora he conseguido... ¡¡¡LO QUIERO!!! ¡¡¡LO QUIERO TODO!!! ... me duele tanto... no consigo...
-Máximo, ¿qué está ocurriendo?
-IMBÉCIL, NUNCA SABRÁS... las cosas van mal... mira a tu alrededor... no encaja... ¡¡¡NO SIGAS HABLANDO!!! ¡TU SER SERÁ MÍO! ... observa los jinetes... Muerte deprimido... Guerra seducido... Hambre con empacho... yo debilitado... ¡¡¡CALLA, MORTAL!!!
-Lo sé. Algo no encaja. Los Jinetes del Apocalipsis se están comportando como colegialas. No han conseguido terminar el fin del mundo en diciembre, ni han logrado arrasar el planeta ni exterminar a la humanidad.
-¡¡¡MORID, MEQUETREFES!!! ... están débiles... la humanidad ha usurpado su puesto... no son necesarios ya... sienten que su hora se acaba porque hombres y mujeres están haciéndolo mejor que ellos... se sienten inútiles...
-¿Este es el fin de los Jinetes?
-¡¡¡NO!!! ... tal como los conoces... sí... pero... ¡¡¡NO LO DIGAS!!! ... pero la esencia de los Jinetes no muere... sólo evoluciona... está abandonando los cuerpos de los Cuatro Jinetes... y se adapta a las nuevas circunstancias... ha encontrado un nuevo cuerpo anfitrión... un cuerpo anfitrión que pertenece a esta nueva humanidad...
-¿Me estás diciendo que las esencias de los Jinetes están poseyendo a un humano?
-¡¡¡CALLA!!! ¡¡¡NO LO DIGAS!!! ... sí... y las fuerzas del Apocalipsis se harán uno con el potencial destructivo de la humanidad... pero lo que sí sé... y no puedo decirte más... es que el cuerpo elegido es el de uno de los Doce Sabios...
-Oh, Dios mío.
-¡¡¡JA, JA, JA!!! ¡¡¡GRAN JUGADA!!! ... no sé cual de los Doce está siendo poseído... pero sí puedo decirte... que sea el Sabio que sea... en realidad hay un fondo de maldad en su interior... y ha aceptado los dones del Apocalipsis...
-Oh, Dios...

Continuará

jueves, 24 de enero de 2013

65 bebés nacieron a los nueve meses de manera natural por parto acuático en el lago de al lado

Llegaron a lo más profundo de las cloacas. Entre grititos de asco apenas susurrados por laurita, el ruído de las armaduras y accesorios de Ambrosio y los desvaríos de Adrián, que en lugar de ir despejándose parecía cada vez más borracho sin saber muy bien cómo, Rebeca ya había perdido toda esperanza de pillar desprevenido a Hambre. Sabía ya que era el jinete que les aguardaba allí abajo, pues había recibido un parte telepático del viejo maestro hacía un rato contándole cómo se estaban desarrollando las cosas por arriba... o más bien despidiéndose/encomendándose a los dioses y pidiéndole a ella que si sobrevivía tomara el mando de los sabios que quedaran vivos. La única que vales, en ti es en quien único puedo confiar, blablablá, lo mismo de siempre. Como si con aquella panda de desgraciados fuera a escapar de las trampas que seguro que había tejido Hambre a su alrededor... ahora mismo temía más por su vida que otra cosa, no tenía ni idea de cómo se las iban a apañar para detener al jinete. De hecho, iba tan sumida en estos y otros pensamientos que no se dio cuenta de que habían llegado a un recodo que se abría a una enorme cueva, que se ensanchaba y engrandecía, con un pequeño charco a la izquierda formado por gotas que caían de la superficie y una explanada a la derecha, y allí, al fondo, una figura enorme, siniestra, con un gesto retorcido y violento daba sacudidas y soltaba unos gritos lastimeros que dañaban los oídos.

-¡Es hambre, todos preparados!

Todos se prepararon y sacaron las armas que tenían a mano y casi formaban un grupo digno y todo. Pero hambre no reaccionaba.

-¡Cuidado chicos! ¡puede ser una trampa!- susurró Rebeca
-Pero...- empezó a decir Adrián
-No podemos fiarnos, es astuto y artero, y...
-Pero es que está echando la pota...- rebatió Adrián.
-¡Argh que assssco!- culminó Laurita, tapándose la nariz.

-POR FAVOR, DEJADME MORIR EN PAZ AQUÍ ABAJO, NO VENGÁIS A TOCAR LOS COJONES AHORA...
-Pero... ¿Qué? ¿Cómo?
-¿¿NUNCA HAS COMIDO NADA QUE TE HAYA SENTADO MAL Y HAS ESTADO EL DÍA SIGUIENTE COMPLETAMENTE ECHA MIERDA, REVUELTA, VOMITANDO Y SIN ÁNIMO PARA MATAR, MASACRAR, VIOLAR, DESTROZAR Y VAPULEAR??
-Bueno, si, pero...
-PUES POR FAVOR, DÉJAME TRANQUILO, ANDA. QUE TENGO LA CABEZA QUE PARECE QUE ME VA A REVENTAR Y EL ESTÓMAGO COMO SI ME LO LLEVARAN LOS DEMONIOS, JODER.
-Esto es inaudito, no puedo más, entre unas cosas y otras me van a destrozar los nervios...
-¿ES QUE YA NO SE RESPETA NI EL POR FAVOR?

-Anda tropa, nos vamos.
-¡Me haces bajar con toda esta mierda aquí abajo para...
-¡Y QUE ALGUIEN HAGA CALLAR A ESA MALDITA BRUJA! ¡SUS GRITITOS AGUDOS RESUENAN UN GÜEVO EN LAS PUTAS ALCANTARILLAS Y SE ME METEN EN EL COCO COMO SI FUERAN TALADROS!
-Mpffgrrssgrrrmpfff...

miércoles, 23 de enero de 2013

64 policías bajaron de los coches y se unieron a la fumada

Ónice, Juanjo y Antonio entraron en el hemiciclo. Muerte estaba sentado en el sillón presidencial, echando un vistazo a un montón de periódicos, mientras sorbía lentamente té verde de una taza de porcelana decorada con corazones rosas.

Su aspecto parecía el de un esquelético petimetre de color azulado, con una cabeza que se asemejaba a una calavera de fulgurantes ojos rojos.

-Es deprimente -la voz de Muerte era similar al crujir de las hojas secas-. Se están matando los unos a los otros. En todas partes. De todas las maneras. Todos se matan los unos a los otros... qué lástima.
-¿Miu? ¿No deberías estar contento? Ese es tu trabajo...
-Efectivamente. Y es un bajón que tantos completos desconocidos hagan tan bien tu trabajo. ¿Para que sirvo entonces? No sirvo para nada... para nada...
-Un Jinete del Apocalipsis... ¿con crisis de identidad? Lo nunca visto -maulló Ónice.
-A mí me da pena, el pobre -comentó Antonio.
-¿Qué hacemos? -preguntó Juanjo- ¿Lo matamos?
-¿Matar a Muerte? -se extrañó Ónice.
-Es que Juanjo tiene siempre unas ideas de bombero que...
-Habló el que asó la manteca...
-Estúpido.
-Imbécil.
-Capullo.
-Gilipipas.
-Caramono.
-Cardamomo.
-¿Eso que ye ho?
-No sé, pero te lo llamo...

Después, ambos aseguraron que fue el otro el que lanzó el primer golpe. La cuestión es que ambos se lanzaron el uno sobre el otro, y puñetazos, patadas, hechizos y mordiscos se intercalaron con conjuros, sortilegios, insultos y maldiciones.

Ónice estaba a punto de separarlos cuando se dio cuenta de que Muerte miraba la pelea fijamente, con absoluto interés.

Continuará



martes, 22 de enero de 2013

63 vehículos policiales fueron usados durante la redada

Ora vete para aquí, ora vete pallá, déjame esto a mi, mejor dedícate tu a aquello... que si que si, que muy fuerte y muy anciano y muy el primer y único sabio fundador de la orden de sabios, pero... ¡no es lógico! ¡no es racional! o sea... ¿enviarme a mi? ¡él es el más poderoso! ¡yo debí haberme quedado con aquellos dos cabezas de chorlito! ¡no, mejor! ¡debí haberme quedado con Alba y Fran, son los únicos decentes y obedientes de toda esta tropa! pero no, claro, como soy el anciano y lider visible y él tiene que guardar las apariencias y manejar las cosas siempre en la sombra... como si no estuviera ya más que claro que existe y está luchando, qué narices factor sorpresa ni gaitas en vinagre... en fin, que hacemos tres grupos para garantizar en lo posible la victoria de alguno compensando la inexperiencia de muchos miembros con ventaja numérica evidente y solo se le ocurre enviarme a mi solo a por Codicia. ¡Símplemente porque se enfadó cuando insinué que había sido un tonto por dejarse engañar tan fácilmente por Muerte! que vanidosos y rencorosos son los gatos, debí haber supuesto que reaccionaría así. Y cuando llegue el momento, muerte le tirará un ovillo de lana y ya está, otra vez olvidándose de todo y de todos y dejándonos abandonados. Y claro, yo soy el que tengo que sacarlos luego de los berenjenales en los que se hayan metido, pero eso no lo cuenta. Jamás me dará las gracias por aquella vez que le salvé el rabo cuando casi se lo arranca Guerra hace 600 años. Y tampoco aceptará nunca que podía haber salvado a Jonás el estomaguero y a Bárbara la bárbara si me hubiera hecho caso cuando caímos en aquella emboscada. Pero noooo, es el supremo lider, las decisiones que toma son mirando a largo plazo, siempre para salvar a el número mayor de gente posible... en fin, el papel lo aguanta todo y las palabras se las lleva el viento. Pero ya se acabó, yo de esta me retiro o me retiran. Que si, que es muy grave que Codicia esté aprovechando los estragos de hambre para escalar posiciones políticas y que vaya a tomar posesión del mando de defensa. Lo que faltaba y eso... pero... ¿y qué quiere que le haga yo? ¿cómo voy a boicotear eso? ¿acaso cree que solo por que seamos viejos conocidos voy a poder convencerle pacíficamente mediante el diálogo de que cese en sus intenciones de controlar el mundo?

-¿ya teminaste tu monólogo?- dijo Ónice mentalmente.
-¿No te cansas de espiar a los demás? ¿no sabes qué es la intimidad?
-¿Un gato? ¿intimidad? si nos lamemos las partes delante de cualquiera, hombre, eso para nosotros no tiene sentido.
-Bfffff
-Anda anda, que lo estás haciendo muy bien. Ahora a por Codicia.
-Uhm... a ver a ver... el tipo más rico del top Forbes, rodeado de guardaespaldas, un recinto cerrado y completamente rodeado de policías, una toma de posesión ante un montón de gente civil y para colmo periodistas y además retransmitido en directo a todo el mundo... ya, claro, como si fuera tan fácil...

62 resacas de arco iris filosóficos

-¡Tú! ¡Maldito!
-¡Argh! ¡Bestia del averno!
-¡Hasta ahora has tenido suerte! ¡Ahora estamos solos tú y yo, nada de ayuditas extra, ni ángeles de la guarda ni trucos sucios!
-¡Eres como un grano en el culo! ¡Te voy a callar esa estúpida bocaza de una vez por todas!
-¡Desearás haber encontrado a Muerte antes de quedarte a solas conmigo!
-¡Con Muerte echaría un par de copas, fíjate lo que te digo! Pero tú... tú... ¡TÚ! 
-¡Tururú! Pffffff
-¡Mamón! ¡Acabemos con esto de una vez!
-¡Defiéndete si es que sabes!

Pero a pesar de tan bravas palabras, Raoul estaba tan debilitado por el veneno que no pudo esquivar el golpe de Guerra y aterrizó duramente tras un breve vuelo de unos cuantos metros. 

-Juro que mataré a Rebeca no más la vea -murmuró Raoul antes de escupir un sanguinolento diente. 

La espada de Guerra partió en dos la tierra donde menos de un segundo antes estaba caído Raoul. El joven Sabio rodó sobre sí mismo y se puso en pie rápidamente, pero un nuevo puñetazo de Guerra en plena cara le hizo caer al suelo. Ignorando su ojo morado y su nariz rota, Raoul alzó sus manos y formuló un leve hechizo de protección, aunque tenía claro que sólo le daría un par de segundos más de vida...

Pero Guerra no pudo dar el golpe de gracia. Sonó un disparo, y su hombro izquierdo se cubrió de sangre. Guerra miró con odio al recién llegado.
-Soy un perro. Un perro bastardo -dijo Arturo. 
Antes de que Arturo disparara por segunda vez, Guerra ya había cruzado la distancia que los separaba y, de un soberbio manotazo, derribó a Arturo.
-¿No es verdad, gacela mía, que están respirando amor?
-¡Cucarachas! -tronó Guerra-. No has matado a una, y dos más ocupan su lugar. Pero esto se acaba... 

Guerra alzó su espada para rematar al caído Arturo, pero el arma salió despedida de sus manos. Zoe sonrió ladina antes de decir:
-Buen disparo, aunque esté mal admitirlo...

A su lado, Alba hacía cábalas y más cábalas. Algo no le cuadraba.
-No es posible vencer a la guerra con guerra... no es posible...

Continuará

lunes, 21 de enero de 2013

61 hippies bailando no se sabe muy bien cómo tras tomar no se sabe muy bien qué

-¡Tu! ¡maldito!
-¡Argh! ¡bestia del averno!
-¡Hasta ahora has tenido suerte! ¡ahora estamos solos tu y yo, nada de ayuditas extra, ni ángeles de la guarda ni trucos sucios!
-¡Eres como un grano en el culo! ¡te voy a callar esa estúpida bocaza de una vez por todas!
-¡Desearás haber encontrado a Muerte antes de quedarte a solas conmigo!
-¡Con muerte echaría un par de copas, fíjate lo que te digo! pero tu... tu... ¡TÚ!
-¡Tururú! pffffff
-¡Mamón! ¡acabemos con esto de una vez!
-¡Defiéndete si es que sabes!
-Miau

...

-¿ein?
-¿mande?

-Meeeeaouuuuuw.... vosotros dos, dejad de hacer los idiotas por un rato. Que el maestro os haya dejado solos no quiere decir que les haya dejado solos. Bastante grave está la cosa por otros sitios y le he mandado a poner pies en polvorones. Iría yo mismo, pero ahora tengo una cuenta pendiente con Muerte. Nada personal. Así que ahora arreando, entrad en el puto edificio de una jodida vez ¿estamos?.
-(Mierda...)
-(Cachis...)
-¡Os he oído soplamocos! que soy un gato, joder, que tenemos buen oído.

domingo, 20 de enero de 2013

Los 60s!!!

Zoe se acercó a Alba.
-¿Qué te ocurre, niña?
-A mí nada.
-Estás a punto de echarte a llorar.

Alba, efectivamente, se echó a llorar. Zoe la abrazó con ternura.
-Anda, desahógate...
-Es que... -Alba sorbió y se frotó los ojos-. Yo nunca creí que Fran y yo comenzáramos a salir de este modo... y soy una nigromante, y hay un montón de espíritus que no veis saludándome... y Fran no deja de miraros el culo a tu hermana y a ti... y...
-Ey, no te subestimes. Si has aguantado todo esto sin volverte loca, es un logro. Y tampoco te hagas de menos físicamente. A mí me pareces supersexy.
-¿Cómo? -Alba abrió desmesuradamente los ojos.
Zoe simplemente sonrió, la guiñó un ojo y se alejó.

-Ratátaro, necesito un manual de instrucciones urgentemente -susurró Alba a su mascota no-viva-ni-muerta

Algo más lejos, Raoul refunfuñaba en voz baja... Mel y Zoe se habían tirado a Guerra, al tipo que supuestamente iba a matarle (ojalá lo del veneno contara como muerte)... un cyborg asesino que ni siquiera era guapo le había tirado los tejos... Rebeca, una chica que realmente valía la pena (o eso creía él), le había machacado la entrepierna dos veces de sendas patadas y luego le había mentido vilmente... sólo le faltaba...

Guerra refunfuñaba en voz baja... Mel y Zoe se habían aprovechado de él... ¡de él, un Jinete del Apocalipsis! Y Raoul había añadido humillación al asunto... Ese Sabio debía estar ya muerto, y en vez de eso reaparece para humillarle... ¡Maldita sea! Le atravesó el costado con una garra de acero, predestinándole a morir cuando volvieran a encontrarse... y aún así, Raoul, en vez de esconderse, aparece con su chulería innata para avergonzar a Guerra... si el resto de los Jinetes se enteraran, sería el hazmerreír...

Raoul estaba tan furioso que estaba seguro de que si Guerra apareciera enfrente de él, lo mataría con sus manos desnudas...

Guerra sólo pensaba en mil maneras de torturar a Raoul antes de arrojar sus huesos mondos al abismo...

-¡Te mataré! -chillaron los dos al unísono.

Y en ese momento se dieron cuenta de que estaban prácticamente uno al lado del otro.

Continuará

viernes, 18 de enero de 2013

Nacen las Gisbon Les Paul en el 59 (del siglo XX)

-Vaaaamos, no os retraséis
-Es que me duelen los piecitos y con todas esas protecciones Ambrosio no me puede llevar a la pela.
-¿Y si la llevo a cuatro patas, excelentísima?
-Hoy no, Ambrosio, hoy no.
-Deja de quejarte, anda, la culpa es tuya por traer esos zapatos.
-¡Pero si son preciosos!... o bueno, lo eran ¬¬...
-En fin, que cruz... ¿y el otro, dónde anda?
-Ahí atrás, hablando solo.
-Si, como desde que entramos aquí abajo...

Tras muchas vueltas y recovecos, se adentraron en una galería larga y estrecha, por donde sólo cabían de uno en uno. Rebeca encabezaba la marcha, seguida de Ambrosio, Laura y un Adrian que por primera vez desde que llegó a casa de Laurita no hacía eses. No había espacio para hacerlas.

-Lo noto...- dijo Laura.
-¿El qué nota, señorita?- respondió el fiel Ambrosio.
-Es una sensación extraña, como un cosquilleo por detrás, como una presión; es un calor extraño que se me sube por...
-¡Suéltala guarro!- gritó Rebeca dándose la vuelta bruscamente.
-Eeeeh... no, no es eso. Al tontolabas lo tengo bien vigilado para que no pasen cosas de esas. Aparte de que en el estado en el que está no sería capaz de acertar a coger una botella que tenga delante.
-¡Essso te crees tú! ¡sólo dime cual de lasss tresh tengo que coger y lo haré!
-En caso de algo alcohólico creo que no apostaría; en fin, dime qué es lo que has sentido con un poco más de precisión. No me fio de nada y mejor andar sobre seguro.
-Ha sido como una presencia, algo diabólico, como una sombra llena de rabia, dolor, sangre. Una pasión desatada y violenta, cruel. Como si una figura oscura y salvaje nos hubiera estado siguiendo un rato, como comprobando algo, como oliéndonos.
-¿Todo esssso? y luego dice quesssssólo notaba una preshión. Presión le hacía yo en las... jjijijij...
-Si no fuera porque temo que sin alcohol serías más insoportable y causarías más problemas ahora mismo te dejaría sobrio. Y quizá de un guantazo. En fin, paciencia... lo cierto es que los jinetes tienen demasiado poder como para ocultarlo demasiado tiempo y a tan corta distancia, y yo no he notado nada. También es cierto que pareces tener un potencial muy superior al mío y es lógico que tengas también una sensibilidad superior a las distintas formas de magia o entes mágicos. De hecho, deberías ser tu quien nos guiaras por estos túneles, estoy segura de que sabes de manera aproximada donde está quien buscamos.
-Si, creo que es por donde vamos, como tu decías. Cada momento es más intensa la sensación de cercanía con una fuerza brutal. Sin embargo, lo que sentí era diferente, era... como un espectro.
-¿Un espectro, dices? debemos cuidarnos de él; son criaturas que vagan por la tierra con una misión, espíritus demoniacos encerrados en la tierra, castigados y ligados de alguna manera a oscuros propósitos. Buscan su liberación ante todo y ante todos y no cejan en su empeño hasta conseguirlo. Aunque nosotros no estemos entre sus objetivos, puede darnos algún susto sólo por diversión. Andémonos con ojo.

Lo que no sabían tres cuartas partes del grupo es que durante su periplo por aquellos fondos nauseabundos había pasado lo siguiente: el espectro, al sentir la presencia del grupo se sintió llamado. Demasiado poder para ignorarlo, carne fresca y sangre caliente que devorar. 

-Hassse un día estupléndido joer ¿qué hay para bebbber?
-SANGRE
-¿Sangre? ¿sangre? essso no tiene graduación. Métete tu sangre donde te q... anda... ¡hermano míooooo! ¡te quiero amigooooo! eh ¿dóndetásmetído?

Confundido, el espectro había retrocedido hasta ocultarse tras un muro. Su ira se encendió de repente, no podía ser posible, no se podía haber asustado de un tío borracho que se adelantara a abrazarlo. Asco si, pero no miedo, el miedo debería sentiro el tipejo ese... aunque tenía la sensación de que a lo largo de la vida de ese tipo no había sido precisamente el primero en hacerle la cobra... así que se abalanzó aún dubitativo pero resuelto a acabar con alguien que le había hecho sentir tan ridículo, con tan mala suerte de que el ánsia hizo perder la concentración al espectro y quedó encajado en un muro cuando trataba de atravesarlo para arrancarle el corazón.

-¿Quépasssatronco? tienes cara destreñío... pero tu reláaaajate, que aquí si sueltas lo que llevas dentro nosssshe va a notar...

El espectro, enrabietado y dispuesto a sacarle las tripas a aquel energúmeno que se estaba burlando de él, salió del muro. Estaba cabreadísimo, nunca un ser humano había visto una forma tan fiera y amedrentadora. Pero hay una clase de personas que lo han visto todo y más en esta vida. A menudo bajo los efectos de sustancias raras y por supuesto, estar borracho cambiaba bastante la percepción de las cosas.

-Anda, migo, tómateeeeesta copichuela conmigo anda, que tienesh malacara- dijo sacando una botella no se sabía muy bien de donde y un vaso de plástico que había recogido de entre los desperdicios del suelo. Tan beodo iba que tropezó y fue a derramarle el contenido encima al espectro, que anonadado por la reacción completamente opuesta a la esperada se había quedado pasmado.
-Lossshiento, lo shiento... y mira que lo sssiento de verdad, que era ya el fondo de la botella. Ahora sólo te puedo ofrecer un pitillo. ¿Te hace con chino o sin chino?

El espectro aún sin reaccionar veía con un pánico creciente, cómo un sujeto aparentemente incapaz de coordinar tres movimientos seguidos liaba un cigarrillo con una mano mientras con la otra encendía una cerilla contra la pared. Húmeda. A la primera. Un brillo intenso inundó por unos instantes los pringosos pasajes, dándoles un caríz aún más siniestro, no tanto a lo que se veía, que ya era bastante sórdido, como a lo que no se veía. Las sombras alimentan mucho más la imaginación que las luces. Dan miedo.

-¡No gastes cerillas jodío! ¡que aquí abajo pueden hacernos falta más adelante!- dijo Rebeca, sin molestarse a mirar siquiera.
-¡Sólosh una, no procuparshe que la aprovesharé mien!

Cansado de tanto juego, el espectro se recompuso y se decidió a atacar. ¡El tipo le estaba ofreciendo un cigarrillo! ¡y sostenía la cerilla en alto para que lo encendiera! que falta de respeto, un pitorreo. Decidido acabar con él, de un manotazo fue a apartar el cigarrillo para luego clavarle las garras en la garganta, pero al aferrarse a él para inmobilizarlo ocurrieron dos cosas. Una, un dolor inmenso y lacerante le inundó por completo y la segunda fue cuando un fogonazo inesperado al acercar la cerilla a su cuerpo aún mojado de alcohol empezó a expandirse peligrosamente por todo su cuerpo. El espectro, lastimado y dolido, soltó un chillido agudo y se olvidó de tan molesto sujeto (ya lo cazaría luego otro día, cuando estuviera desprotegido) y se lanzó a un ramal de las cloacas por donde bajaba algo más de agua con el propósito de apagarse. Eso le pasaba por jugar en lugar de centrarse en lo que tenía que hacer. Debía ser un castigo de los de ¿arriba? ¿abajo?, si eso era. Se liberaría primero, y luego podría divertirse todo lo que quisiera, como le habían prometido.

-Posss no hasalío corriendo el joíio ni ná. Casi me sssisa la medallita que le birlé ar Brosssio y enssssima me ha tirado el canuto.
-¿Qué pasa por ahí atrás? ¿¡Ha sido eso un gritito!?
-Ha sido alguna rata grande, asquerosa, peluda y llena de pulgas, que la hemos asustado- dijo Rebeca con la intención de que Laurita acelerara el paso-. ¡No os paréis ni os rezaguéis, que parecéis tortugas!
-Pffff, si, tortugas, tortugas... en tortuga si te convertía yo.
-¡Te he oído!
-¿Y a mi qué?
-¿Ya estamos otra vez?
-Aysss... en fin. Échame una mano, Ambrosio.
-Si mi ama.
-Vaaaaamos, no os retraséis.


jueves, 17 de enero de 2013

58 camareros cabreados y un maitre desmayado

Noche cerrada. Juanjo y Antonio caminan por las calles desiertas. Están, literalmente, a punto de saltar el uno sobre el otro. La lucha de clases, la discusión política y la psicología social priman de momento sobre la salvación del mundo.

El viejo profesor les sigue resignado. Deben enfrentarse a Muerte, el más temido de los Jinetes. En principio, deberían ser otros Sabios los elegidos para tamaño desafío. Pero estaba claro que nada marchaba bien. Ya ni Rebeca actuaba decentemente y su ego había torcido las cosas. Ni siquiera contaban ya con Ónice, el Gato-Ninja-Sabio-Todopoderoso... Muerte había hecho gala de su astucia y, sin que nadie se diera cuenta, un extraño punto rojo que se movía fugaz atrajo la atención del felino.

Antes de que reaccionaran, Ónice escapó a la carrera persiguiendo el punto rojo. A saber donde estaba el gato ahora...

Y así, el anciano profesor avanza mientras sus dos reclutas discuten con frases como "¿Qué coño me hablas de Nietzsche?" "¡Eso no era comunismo! ¡Eso era una mierda!" "¡Claro! ¡A ti te lo daban todo hecho!" "¡Arriba, parias de la tierra!" "¿Que tú votaste a qué?!!"

Al cabo de un rato, llegaron a su destino.
-Aquí es donde se oculta Muerte -dijo el profesor.
-Pero...
-Si esto...
-Si esto es...
-Efectivamente. Es la sede del (póngase aquí el nombre del partido político mayoritario que usted guste).
-¿Aquí vive Muerte?
-Por supuesto -asintió gravemente el anciano profesor-. Es aquí. Es obvio, ¿no os parece? Es aquí donde las ideas mueren...

Continuará




57 minutos después de hacer un sinpa en el bar

Sorprendentemente, cuando llegó abajo no hizo el típico chooooof! al caer sobre la también típica agua  sucia, maloliente y semisólida con tropezones que suele haber en los típicos túneles de alcantarillado, sino un pequeño plis! que apenas salpicó hacia los lados; ya ambrosio había evacuado la mayor parte de las aguas negras que inundaban aquel trozo de alcantarillado y llevaba medio limpia una de las paredes laterales, parecía que todo el peso de su equipaje no le estorbaba para nada, al contrario de la apariencia torpona que tenía arriba. Para colmo y misteriosamente, no tenía ni una mota de suciedad encima. De haber llevado smoking, un ojo poco entrenado podría haberlo confundido con James Bond.

-¡Así, dale duro!- jaleaba Laura, con su gracejo característico.
-Si mi ama.
-Mi mamamemima... sssólo 5 minutos máaas porfaaa...

¿...? (suspiro) en fin, tu mejor ni lo intentes, tu a lo tuyo, sigue tu camino, es tu grupo y sólo eso, si te pones a pensar va a ser peor... (otro suspiro)

-A ver, a ver... emmm ¿estamos todos? enga, vamos por allí...
-¿Y por qué por allí?- replicó la siempre testaruda Laura- mi instinto dice que es por allí. Se ve más luz y está más limpio...
-Precisamente, se supone que vamos a lo más profundo, sórdido, feo, asqueroso y mierdoso de estas alcantarillas. Justamente hacia este lado.
-Quien me mandaría a mi... Ambrosio, ven conmigo, nos vamos.
-Si mi ama
-...tresmilsitesientas ovejitas y cinco guanaminós, tresmilsitesientas ovejitas y seis guanaminós...
-Debemos parar al jinete de las narices. Se nos acaba el tiempo y  si no lo hacemos podr...
-A mi no me pagan para eso; de hecho, ya me deben varios millones por destrozos, daños y perjuícios y demás.
-Y mis honorarios, mi ama, que limpiar todo eso y todo esto me va a costar muchas horas extra.
-Trompi, tu si que me entiendes ¿de verdad quieres quedarte a dormir conmigo?
-No seas cabezota, te necesito (sigh) para tener una oportunidad de pararle los pies a ese...
-¿Por qué? ¿acaso me ha hecho algo a mi?
-Si se trata de Codicia... si. Creo que fue el tiburón que te arrebató aquel holding empresarial en el que tenías tanto invertido...
-¿Ein? ¿en serio? arg, haber empezado por ahí. Pues busquemos a Codicia entonces. Y dudo que esté aquí abajo metido, así que primero salgamos arriba y...
-No, aquí está uno de ellos; si no es codicia, parándole los pies haremos que este salga de su escondrijo. Si no están todos podremos irlos derrotando uno por uno, el verdadero problema es que se junten. Y créeme que los sabios tenemos unas cuantas cosas que decirle a Codicia, así que tendrás tu ración de leches que darle, no te preocupes.
-¿Me lo prometes?
-Si
-¿Me lo juras por snoopy?
-¡Snoopy! ¡vivaaah!
-Si
-¿Lo juras por tu bolso?
-¡Ouaaauh! ¡esssstha tía está jugando fuerrrte! ¡hacer jurar por su bolso a otra! ¡esssso siques sagrado!
-Que si leñe, y dejaos ya de tonterías. En fin, avancemos, que cuanto antes salgamos de esta mierda mejor. Literalmente. Y que alguien despierte a ese... a ese.
-¡Ambrosio, despiértalo!.

56 chupitos, que invito yo

-Ni borrachita me meto yo ahí -dijo Laura.

La naginata de Rebeca trazó un grácil surco en el aire, trabó las piernas de Laura y la hizo caer de bruces a la alcantarilla abierta.

Chillidos histéricos retumbaron en las profundidades.
-¡Iiiiihhh! ¡Ratas! ¡Muchas ratas! ¡Iiiiiiihhhh! ¡Y mierda! ¡Mucha mierda! ¡Iiiiih! 

Rebeca resopló. Estaba hasta las narices de su grupo y ni siquiera había empezado la misión. Agarró el inerte cuerpo de Adrián (que estaba durmiendo la mona) y lo lanzó al maloliente agujero negro. Luego se dirigió al mayordomo.
-Ambrosio, no es necesario que hagas esto.

El espigado mayordomo, ataviado con casco y chaleco antibalas, con un sudario de protección mágica enganchado a sus hombros, el amuleto de defensa -5 CA que pesaba ocho kilos colgando de su cuello, ropa reforzada, y dos bandoleras con una escopeta recortada, un cuchillo de caza, munición y equipo de supervivencia... todo ello, según él, "para estar a la altura". La realidad era que apenas podía moverse.
-Le agradezco la intención, pero debo atender a la señorita Laura, independientemente de cuales sean las circunstancias. Me han contratado para ello. 

Y Ambrosio dio un paso al frente, cayendo a la alcantarilla.

Rebeca repasó su equipo. Se suponía que las cloacas eran el cubil de uno de los Jinetes. Pero no estaba segura de cual de ellos... 

-¡Iiiiiihhhh! ¡Lo juro! ¡Lo juro! ¡He visto un cocodrilo! ¡Iiiiihhh!

Rebeca suspiró. Tenía la intuición de que esta sería la misión más difícil de su vida. Y no sólo por los peligros...

Con un gruñido de fastidio, se dejó caer a la cloaca.

Continuará

martes, 15 de enero de 2013

cinco cinco cincos

-Nada, ni con el boca a boca. Será mejor que lo llevemos a un lugar seguro.

Arturo se había adelantado y había confeccionado una camilla con un par de varas de tronco flexibles y resistentes y un trozo de cortina arrancado de no se sabía muy bien donde.

-Pues mira Mel, no te vendría mal un trozo de cortina también para ti.
-Tu traje está más hecho polvo que el mío, si casi que se te ve todo el culo.

-¿Fran?
-¿Si, Alba?
-¿Me quieres?
-ClaroquetequieroAmorMío
-¿De veradad?
-Con toda mi arma y todo mi corasssón
-¿En serio?
-No he dicho nada más en serio en toda mi v...
-¡Pues deja de mirarlas!
-¡No les miro nada!
-Ya, claro, eso dicen todos.
-No te enfades, si yo solo te quiero a ti, jooo.
-en fin... ¿Tu crees que podremos curarlo?- le preguntó a Mel.
-Pfff menudo paladín de mierda está hecho. Tanto poder de curación y tanta leche y muere envenenado... anda Zoe, ayúdame que lo vamos a llevar a la cama... no me mires así, no vamos a llevárnoslo a la cama DE ESE MODO.
-Bueno, hay que aprovechar mientras eso siga así...

El grupo de cinco miró a donde Zoe señalaba y un oooh de sorpresa mezclado con una pinta de admiración o acaso envídia se elevó al cielo.

-Ejem... debe ser cosa de... el veneno, si, eso. Eso o que nos está timando -dijo en tono amenazador mientras clavaba unos ojos furibundos sobre los ojos cerrados de Raoul. Si estás aprovechando que te llevamos en camilla para mirarnos el culo mientras andamos te vas a enterar. Eso solo se pone así en caso de asfixia o de subidón, así que ya puedes levantarte y dejar de hacer el tonto, que nos conocemos.
-Me ha revivido y quizá vuelva a morir dentro de nada, ¿por qué con él si y conmigo no? ¿por qué no me dejáis... despedirme o algo? por lo menos disfrutar del camino...
-Bueeno, a mi me parece un argumento razon...
-¿¡Pero Mel! ¡que dices!?
-Digoooo que debería terminar de curarse y ponernos todos en marcha, que Guerra nos sigue la pista y no tardará en alcanzarnos pese a las defensas de no muertos.
-Verás, no es tan sencillo. Efectivamente, soy inmunne a los venenos, desde que los detecto puedo eliminarlos salvo que esté muy muy débil. Podría curarme.
-¿Entonces?
-Es que verás... es que yo...  yo... soy alérgico.
-¿Alérgico al veneno? ¿te estás riendo de nosotros? ¡nadie es alérgico al veneno!
-No, porque se mueren antes. Yo no me muero, pero me debilito todo y me salen sarpullidos. Y debilitado, un poco de veneno ya si que me afecta, así que me hacía el muerto para que me salvárais el culo.
-¡Será mamón!
-¡Idiota!
-¡Cretino!
-¡Te quiero no solo por como eres, sino por como soy yo cuando estoy contigo!

Todas las miradas se volvieron hacia Arturo. De repente, a un barco se le acababa de caer el mástil.

-Esas cosas que dice no las dice en serio ¿verdad?
-Si yo fuese el mar, y tu una roca, haría subir la marea, para besar tu boca.
-estoooo... alguien quiere hacer el favor de decirle que...
-En esta noche tan fria yo te ofrezco mi estufa, no tiene pilas ni cables pero igualmente se enchufa.
-Vale, ya está bien, medio muerto o como sea, me largo.

Y se levantó renqueante y antes de que nadie pudiera decir nada, se alejó en solitario.

-¿Ves? tanto rollo conque estaba malo y míralo, no nos necesita, como siempre.
-Pues yo creo que si que está malo de verdad, que no mentía...
-¿Cómo puedes decir eso?
-Pues porque en lugar de huír hacia un sitio seguro se ha marchado por donde viene Guerra... y no creo que lo haya hecho adrede.

lunes, 14 de enero de 2013

54 maneras de quererte

-Creo que puedo mantenerle un rato ocupado -dijo Alba con los ojos en blanco y su cabello ondeando por un aire inexistente-. Es muy fácil hacer que aparezcan esqueletos una vez le pillas el truco...
-Alba, ¿te has dado cuenta de que tienes el esqueleto de un hámster en el hombro? -preguntó extrañado Fran.
-¡Sí, se llama Ratátaro! Es muy mono y... y... esto ya me está pasando factura psicológica...
-Voy a intentar crear parapetos o barricadas o lo que sea para cubrirnos.
-Bien pensado...
-En mis sueños siempre estamos unidos tú y yo.
-Que sí, bonito... que nosotros también te queremos, Arturo...

Mel y Zoe llegaron cargando prácticamente con Raoul.
-¿Se puede saber a qué ha venido esa entrada? ¡Teníamos la situación controlada! -protestó Zoe.
-Os estabais tirando a vuestro enemigo y al asesino de vuestros compañeros... ¿a eso le llamáis tener la situación controlada? -gritó Raoul.
-Bueno, no te pongas así. He captado efluvios mágicos de un hechizo de apasionamiento. Nosotras no tenemos la culpa de...
-¡Ese hechizo sólo funciona si hay un mínimo interés! ¡Explícame eso!
-Bueno... es que el tío está macizo y...
-Y luego me acusan a mí de ser materialista...
-Está bien, "intrépido líder"... ¿qué hacemos ahora?
-¿Ahora? Salir de aquí pitando, está claro.
-¿Qué?
-¿Tengo que recordarte que estoy predestinado a morir contra Guerra? Bastante he tentado ya a la suerte...
-Eso es cierto -asintió Mel-. Y más que te estaba lanzando los tajos con la Espada Emponzoñadora.

Raoul miró fijamente a Mel.
-¿Empozoñadora? ¿Espada Empozoñadora?
-Sí. La que tiene el filo envenenado y si te hace un arañazo la palmas y...

Una gota de sudor cayó por la frente de Raoul.
-No me digas qué...
Raoul se dió la vuelta. No tenía uno. Tenía tres largos arañazos en la espalda.

Raoul cayó muerto al suelo.
-¡Raoul! ¡Raoul!
Mel y Zoe intentaron reanimarle mientras lloraban. Fue en vano.

Alba gritó:
-¡Tengo que intentarlo!
Una energía blanquecina tomó forma como una vaporosa presencia y viajó desde las manos de la niña hasta el pecho de Raoul.

Raoul se levantó poco a poco.
-¡Estás vivo! -gritó Mel mientras le abrazaba.
-Sí, y no soy un zombi... parece... -comentó Raoul.
-¡Eres genial, Alba! -clamó Fran mientras la abrazaba.
-Sólo una pregunta -dijo Raoul-. ¿Habéis sacado de mi cuerpo el veneno antes de revivirme?
-No...

Raoul cayó muerto al suelo.

Continuará

sábado, 12 de enero de 2013

Y ha cometido 53 faltas de ortografía (los monos de la ESO, en mis tiempos esto no pasaba...)

En ese instante, Fran recordó lo que habían hablado momentos antes de que Raoul partiera y pensó rápidamente en cómo hacía normalmente para meterse en sus propias historias cuando fantaseaba, buscando la manera de detener aquella locura y escapar con Alba. La cogió de la mano e imaginó follaje para facilitar a todos que se ocultaran y la arrastró lejos del peligro, tras unos matojos. Alba se dio cuenta y se dejó llevar, sonriendo feliz pensando en que por fin su caballero había llegado para rescatarla. Una vez escondidos y a salvo, se juntaron, se abrazaron y por fin, se besaron... y Fran perdió el control de sus poderes (o más concretamente, el resto le importaba tres rábanos fritos).

Mientras para ellos el tiempo se detenía y todo pasaba alrededor como un suspiro, sin molestarlos ni interrumpirlos, a los demás les empezaron a pasar cosas raras. Casi todos se habían sorprendido al principio al encontrarse de repente en medio de una espesa vegetación, que al momento aprovecharon de maneras distintas. Zoe y Mel, que se habían quedado un tanto atrasadas, aprovecharon para vestirse un poco y colocarse algo de protección y armarse. Raoul se escabullía como podía del sable de Guerra, que era grande y terrible, y relucía y brillaba como si hubiera sido limpiado a conciencia recientemente. Tras un árbol que había surgido de la nada, Raoul hiperventilaba lo más silenciosamente posible, mientras guerra hendía su sable en todos los rincones oscuros que veía con la esperanza de horadar a su rival. Arturo, maravillado ante tanta magnificencia, se dedicaba a catalogar las especies vegetales mientras preparaba una ensalada y soltaba imprecaciones a los políticos y cantaba. Ni Arguiñano, oiga.

En un momento dado, todo cambió. Primero, el árbol tras el que se guarnecía Raoul desapareció, dejándolo sin protección. Para más inri, su uniforme se transformó en un tutú rosa y sus armas en flores. Arturo se dedicaba a correr tras las mariposas, a Zoe le había aparecido un pequeño pony azul celeste con pelo rosa, un arcoiris en los costados y brillantinas y a Mel le había cambiado el vestido por el traje de noche rosa de la cenicienta. Guerra, que por fin había descubierto a su enemigo y lo había acorralado, se vio sorprendido cuando vio cubiertas sus partes con un bañador de elefante, con trozos de tela con una oreja dibujada a los lados y una trompa alargada, que le vino muy bien para enfundar el sable al que en la punta le había salido un lacito, también de color rosa. Sonriendo amenazante y tomándose su tiempo, haciendo crujir sus nudillos se iba acercando; quería hacerlo despacio y bien, sin prisas, divirtiéndose todo lo posible. Tenía cuentas pendientes con Raoul y pensaba cobrarse con creces, y si bien Guerra no daba tregua nunca, al menos luchaba con honor y sabía que con su arma en las manos no estaban en igualdad de condiciones. 

En ese momento, hubo otro flash y estaban los cuatro atravesando el mar a toda velocidad, al fondo un paisaje de playas. A Arturo le había crecido una aleta dorsal y cortaba el agua a toda velocidad, dando vueltas cerca de la lancha. Raoul iba conduciendola y remolcaba al trío conformado por Guerra, Zoe y Mel que intentaban aferrarse con la mayor fuerza posible a la cuerda el primero y hacían acrobacias y figuras espectaculares sobre el agua las otras dos. Otro cambio raro sucedió justo cuando Raoul estaba cortando con una sonrisa vengativa la cuerda de un aterrorizado Guerra, cuya mente intentaba huír del terror del ahogamiento y los tiburones pensando en los buenos momentos pasados en el mar (¿desde cuando se hace la guerra en el agua? ¡nunca! ¿quién necesita nadar? ¡si mueres que sea destripando corsarios en la proa de un barco! ¡caer al agua y hundirse con el barco es para los demás! Jajajaja, que buenos tiempos con aquel zorro de mar del barbachunga...).

Ahora estaban en un parque de atracciones, pero como contagiado por los pensamientos de Guerra, eran atracciones basadas en el mundo pirata. Habían tesoros, habían bucaneras, un loro metálico cantando canciones de los Beach Boys, un barman en su taberna escupiendo en un vaso para limpiarlo y un siniestro pirata demonio zombie con las barbas ardientes. Éste, más que a gusto con su nueva apariencia enfiló hacia el barman sable en mano cuando de repente hubo otro flash y su aspecto cambió de nuevo en un mono enorme con corbata y el plátano en la mano. Enfadado, este apaño de Donkey Kong estrujó el plátano estratégicamente hasta que salió el contenido disparado de la cáscara directamente hacia el barman, que lo esquivó como pudo porque tenía una pata de palo que no estaba acostumbrado a usar. En pleno ataque de furia, el gran mono bramó y empezó a arrojar los barriles de grog que tenía a mano, que un rehabilitado barman al que le había crecido una pierna y le había salido bigote estaba saltando como podía. 

Estaba siendo engañado con una tosca ilusión mental y tenía que acabar con aquello. Se concentró y rompió la ilusión bruscamente, tanto que sacó a los tortolitos de su mundo y los puso de repente a la defensiva, como si sus padres los hubieran pillado... estudiando... muy tarde... juntos... sin apuntes... en la bañera... porque hacía calor y eso y si abrían las ventanas hacían corriente.

En ese momento, una horda de esqueletos se izaron y rodearon a muerte, que en principio había hecho esfuerzos por romper la nueva ilusión que no era tal y ahora se encontraba repartiendo estopa con evidente cabreo, pues los esqueletos no sangran y aunque débiles son muy cabezotas y persistentes, cosas que tiene el no sentir dolor. Y esas eran cosas que Guerra odiaba, donde estuvieran las tripas, los lamentos y las súplicas...

 Mientras, el grupo se reunía y se retiraba para reorganizarse y cambiar el plan de batalla...

viernes, 11 de enero de 2013

Pues 52 páginas lleva ya el mono...

A Raoul sólo se le ocurrió decir:
-Esto no es lo que parece...

El alarido de Guerra fue contestación suficiente como para que Raoul emprendiera una acción evasiva (correr como un poseso en dirección contraria).
Guerra fue detrás suyo, con el arma (espada) entre las manos.

Mel y Zoe se miraron la una a la otra.
-¡Guerra! ¡Raoul! ¡Esperad!
Mel se lanzó a perseguirles, pero la voz de Zoe detrás suya le hizo detenerse:
-¡Pero vístete antes, juer!

-Alba -dijo Fran-. Yo...
Alba bajó la mirada.
-Lo siento. No debí haberte besado. Fue muy tonto por mi parte...
-No, no, Alba. Es que... yo imaginé que... bueno... creo que tú y yo...
-¿Sí?
-Es que... no pensé... y Laurita...
-Laurita. No te preocupes. Lo sé. Nunca podré competir con ella. Ahora menos.
-¿Por qué?
-Dí la palabra.
-¿Ein?
-Que soy una nigromante, joder...
-Pero no me importa... yo...
-Yo...
Poco a poco, imperceptiblemente, los rostros de Alba y de Fran se acercaban milímetro a milímetro. Sus labios, tan lejanos, estaban cada vez más cerca.

Cuando sólo faltaban milímetros para tocarse, se escuchó la voz de Arturo:
-My little pony. My little pony. I used to wonder what friendship could be...

Fran dijo:
-No me importan las interrupciones... Alba, yo...

Pero en ese momento apareció Raoul corriendo y dando alaridos, perseguido por una montaña de músculos cabreada y desnuda con una espada en las manos, y dos chicas jóvenes a medio vestir gritando detrás de ellos.

-¡Sopa de caracol! -terminó Arturo

Continuará

jueves, 10 de enero de 2013

Unes 51 puntos y te sale el dibujo surrealista de un mandril borracho mecanografiando apuntes de física cuántica

-Nos acercamos, mejor pararnos aquí y organizar una estrategia conveniente para poder enfrentarnos a Codicia. Tengo una sensación rara, así que desconfiemos de todo y vayamos con pies de plomo ¿de acuerdo?
-Si- dijo Fran, obediente.
-¡Coge tu pokedex y hazte con todos!- añadió el androide.
-Ehhh, supongo que si...- titubeo Alba.
-Bien, así me gusta. Chicos obedientes. La disciplina y el cuidarnos todos unos a otros es el primer paso para la supervivencia. Bien, hagamos un repaso al grupo para determinar la táctica más óptima. Aquí el androide es un metamorfo cybernético guerrero de alto nivel, muy versátil y capaz tanto ofensiva como defensivamente. Su agilidad, destreza y capacidad de aguante lo convierten en un perfecto bloqueador, con lo cual será la vanguardia del grupo de ataque y los demás actuaremos de apoyo ¿estáis de acuerdo?
-Puedes pegarme. Puedes tirarme al suelo, incluso escupirme y mearme. Pero por favor, no me aburras- contestó.
-Creo que eso es un si- dijo Alba-, pero yo aún no sé muy bien qué puedo aportar al grupo, y tampoco creo que Fran...
-Oh, Fran es una pieza clave. Es astuto, sigiloso, ser pequeñito le permite pasar desapercibido y meterse por sitios por donde otros no entran. Para colmo, tiene un asombroso poder de confusión mental que le permite crear mundos ilusorios en los que involucrar a los demás; aunque él no lo sepa por falta de entrenamiento, puede conseguir que otros se hagan pajas mentales pensando que están en Torrevieja de vacaciones mientras los desvalija tranquilamente. Vamos, ha nacido para ser saqueador, tiene los atributos del ladrón perfecto. Y es también muy útil como explorador y avanzadilla para el grupo. Evidentemente, el enemigo ahora está ahí enfrente, no nos hace falta tanto en la vanguardia como cubriéndonos las espaldas. Las tácticas del enemigo son muy retorcidas y tener un AS en la manga que aparezca en el momento menos pensado y nos salve el culo siempre es bienvenido.
-Vaya, me había colado en muchos sitios y había escapado de muchos líos, pero nunca pensé que fuera gracias a tener poderes. Quizá eso explica como alguien como yo terminaba escapando siempre de cualquier lado- apuntó Francisco.
-Bien, y tu, Alba, tienes una inteligencia superior, eres buena en la parte táctica...
-¿Y qué poderes tengo?
-...y eres muy enérgica y activa y... ¿he dicho que eres inteligente?
-¿Y qué poderes tengo?
-...¡ah! y una personalidad preciosa, todo hay que decirlo, aparte de que...
-¿Y qué poderes tengo?
-...no hay que olvidar que tienes un gran potencial militar y estratega y...
-¿¡Y QUÉ PODERES TENGOOOOO!?
-...
-...
-ufff... bueno, la verdad es que... eres una nigromante... ale, ya lo he dicho.
-¿QUÉ?
-Pues eso, que tienes mucho potencial mágico y...
-¿QUÉ?
-Que eres capaz de manipular ciertas clases de magia y...
-¿QUÉ QUÉ QUÉEEE?
-¡Que despiertas y manipulas a los putos muertos, cojones ya!
-Arrrrgh ¿por qué yo? ¿¡la pija de mierda es una bruja superpoderosa que hace cosas chulísimas y a mi me toca bailar con gente podrida y despertar tipos asquerosos de hueso!?
-En fin, lo que tiene uno que aguantar. ¡SI!
-Pffff lamadrequelosparióatodoscomomegustaríacogerlosy..y..
-Todo lo que se necesita para dirigir es alguien que te dé el trabajo. Así que me dije: chico, el trabajo es tuyo- exclamó Arturo.
-...matarlosyresucitarlosparaluegopodervolveramatarlossisevanacagarlosmuy...
-¿y tu, qué se supone que eres exactamente?- preguntó Fran.
-Yo soy un guerrero santo, un apoyo poderoso para Arturo en vanguardia, con capacidad de curación y cierto potencial mágico que puede ser muy útil para reforzar las habilidades de grupo y eliminar hechizos malignos que puedan penalizarnos. Lo que viene siendo un paladín
-¡Porque con paladín minuto podrás disfrutar del más auténtico chocolate a la taza en un solo minuto!
-¿Paladín tú?¿hombre santo? ¡pero si tu no crees en nada!- resonó con mucha sorna una voz femenina en sus cabezas.
-¡Pues si! ¿qué pasa? a alguien le tenía que tocar ¿no?
-¡Pero si tu padre es el mismo demonio y tu no andas muy lejos! ¡paladín, que risa!
-¡Andayveteacagar! ¿que pasa, que los santos tienen que ser todos buenos? ¡hay muchos santos que fueron grandes cabronazos guerreros!
-Tu de Santo no tienes ni la ese, niño
-Habló la virgen María... en fin. ¿Tenemos claro el papel de cada uno? Yo y Arturo delante, Alba apoyando con hechizos y Fran cubriéndonos las espaldas y atacando a distancia por si las moscas.
-eeerrrr siiii, supongo...
-¿Estamos listos entonces?- dijo Raoul.
-El mundo se divide en dos, Tuco: los que encañonan y los que cavan. Y el revolver lo tengo yo, así que ya puedes ir cogiendo la pala- citó Arturo.
-Bien entonces. Como ya hemos planificado, debatido y organizado... todos sus quedais aquí que yo vuelvo ahora mismo ¿ENTENDIDO?.

...

-Bien, así me gusta.

Raoul de un salto se pone en marcha y deja al patidifuso grupo atrás y se acerca lo más sigilosamente posible a la casa donde se concentra toda la energía maligna, mezclada con otras energías más débiles que lo tienen algo confundido. Siente que algo no va bien y no quiere exponer al grupo. O al menos eso quiere decirse a si mismo, pero tiene claro lo que en realidad busca: venganza. Para pillar por sorpresa a su enemigo, decide dar un rodeo e ir por detrás. La habitación parece tener dos puertas, pero sabe que Codicia estará preparado para reaccionar ante cualquier peligro que provenga de ellas; así pues, decide usar un poco de magia para hacer desaparecer un trozo de muro mientras salta por el hueco al otro lado en una pose de ataque directa y relampagueante.

En el interior de la habitación, Guerra yace desnudo junto con Zoe y Mel, tanquilo y relajado. Si fumara, ahora mismo estaría fumando dos pitillos a la vez. Tanta paz, tanto sosiego... siente que algo está mal en todo esto, pero se lo ha pasado en grande y no le importa. Desearía que esto durara indefinidamente... cuando un gran estruendo seguido de un grito, primero enérgico y lleno de resolución y luego de pánico y extrañeza resuena en el interior del armario empotrado. A trompicones, una figura con gesto salvaje, sale del mismo luchando contra camisas, pantalones y corbatas, hendiendo el aire con una enorme espada, como peleando contra un enemigo invisible y de un potencial infinito. Tras observar la cómica escena un buen rato, una mala leche indecible se apodera de Guerra. Lo sabía, unas chicas como estas no podían ser de una sola pareja, debía de haberlo supuesto. Al fin y al cabo, se trataba de un lío, nadie podía querer a alguien como Guerra. Perplejo, Raoul se ha dado cuenta de que no se trataba de una trampa y de que no estaba siendo atacado por serpientes venenosas eléctricas constrictoras del Kazajastán y que tiene a Guerra desnudo enfrente suyo con cara de muy pocos amigos y con el arma entre las manos. De repente, a Raoul le entraron ganas de huír y salvar el culo.

¡Has hecho un pareado! ¡50 puntos!

-Rebeca, escúchame -sonó la voz del anciano profesor en su cabeza-. Tienes nuevas órdenes. Coge a tu grupo y dirígete a las coordenadas x15028 e y96772 para detener a Guerra y...
-Un momento -dijo Rebeca-. ¿No está predestinado que Raoul se enfrente a Guerra?
-Es por eso precisamente. Está predestinado que Raoul muera cuando vuelva a luchar contra Guerra. Queremos impedirlo.
-Pero si está predestinado, nada de lo que hagamos ahora podrá variarlo. ¿No sería mejor que fuera él y no arriesguemos otras vidas?
-Rebeca, ¿es cobardía lo que oigo de tus labios?
-No, es simple cuestión práctica. No tengo inconveniente en enfrentarme al mismo Muerte. Pero si Raoul...
-Rebeca, no hay tiempo de discutir. La vida de Zoe y Mel corren peligro y...
-Espera, Zoe y Mel son unas pelanduscas de cuidado, como diría mi amiguita pija aquí presente. No pienso arriesgar el culo por ellas.
-Rebeca. Es una orden.
-De acuerdo. Lo acato. Corto y cierro.

Rebeca sonrió ladinamente y se acercó a Raoul.
-Raoul, tengo las coordenadas donde se encuentra Codicia -susurró-. Son x15028 e y96772. Imaginé que te interesaría...

Continuará

martes, 8 de enero de 2013

49 copas para cada mandril y a dormir la mona todos a su cubil

Muchos dicen que el universo comenzó con un gran estallido. Algunos por la magia de un Dios, otros por la eclosión del Gran Huevo Cósmico, algunos piensan que simplemente estaba allí cuando llegaron los de las mudanzas y empezaron a poner planetas y demás mobiliario. Pero eso no es lo que nos ocupa aquí. En realidad para cualquiera con algo de sentido común, tanto el universo como la vida comienzan en el momento en el que se empiezan a tener recuerdos, da igual lo que haya sucedido antes. Y esto es así porque lo que quiera que haya sucedido antes ya se lo inventará la persona que más labia tenga y los muy tontos de los demás se la creerán a pies juntillas, y perdurará a lo largo del tiempo con las manipulaciones y cambios que se necesite en cada momento.

Realmente, no hay universo sin historia, y el comienzo de la historia como concepto también ha tenido múltiples interpretaciones a través de los tiempos. Unos piensan que la historia es lo que escriben los hombres, cuando estos descubrieron el folio A4 y las estilográficas. Otros que es el destino, tejido por viejas brujas amorfas que no ven tres en un burro y que da lugar a unos tapices horrorosos que no sirven ni para felpudo. Otros que era escrita por los sabios y venerables monjes ancianos contadores de cuentos del Nepal. Algunos, que las historias eran cantadas por musas o contadas por viejos oráculos en templos perdidos; en realidad, ahora sabemos que la historia, y lo que es lo mismo, el destino, el universo y el todo, se resume en 42. Y más allá de eso, sabemos que en realidad quien escribe la historia es una jauría de mandriles borrachos con máquinas de escribir. Cierta teoría dice que se trata de un millón y que se trata de monos. Otros piensan que son solo unos cientos, y hay hasta quien piensa que son solo dos. Algunos herejes incluso plantean que puede que ni siquiera estén borrachos. Vistas las cosas que pasan y cómo pasan, en lo de la borrachera no debería caber duda. Y las manchas de tinta, los borrones, tachones, incoherencias y demás, dejan claro que las máquinas de escribir que usaban no eran lo último de lo último. 

Curiosamente, lo que no sabe la gente es que aparte de quien la escribe, hay un grupo de correctores, editores y publicadores. Como es normal, los correctores solo echan un ojo por encima y solo corrigen algo cuando encuentran palabras que no usa nadie como ornitología, plebiscito, tornasolado y anafilaxia, claramente salidas de la calenturienta mente de los simios. Los editores se encargan sobre todo de... bien, también están los auditores, que todo el mundo teme y que supervisan que no implosione El Todo debido a alguna desafortunada cadena de acontecimientos. Una de esas potenciales catástrofes estaba a punto de suceder. Todos los mandriles habían escrito la palabra Apocalipsis en alguna parte de sus folios, como si se hubieran puesto de acuerdo de alguna manera, quizá cansados de hacer horas extra o alguna cosa similar. Las veces que habían puesto cosas como sindicato, huelga o sus vais a cagar, habían llegado de repente los auditores y habían salvado al universo. Ahora, parecía como si se hubieran marchado de vacaciones. Muy muy lejos.

48 surrealistas mandriles se fueron de copas (pocas)


El vaso, ya vacío de whisky, rodó por la alfombra.

El viejo profesor de matemáticas agarró con mano trémula la botella. Estaba vacía.
-Lhos cojjjonesss...

El gato le miró con ojos inquisitivos. Musitó un suave maullido que dio forma a un hechizo de limpieza. El anciano maestro volvía a su sobriedad habitual gracias a la magia felina.
-¿Por qué me has quitado la borrachera?
-¿Por qué le estás dando a la bebida?
-Creo que lo sabes mejor que nadie. Mira nuestra orden. Teníamos que crear a una nueva generación de Sabios que lucharan contra los Jinetes del Apocalipsis. Y lo que tenemos es a un montón de frikis inadaptados, borrachos, lunáticos, inconsecuentes, irrespetuosos, abobados...
-Están también Rebeca y Raoul...
-Y un cyborg capaz de destruir media ciudad que va tarareando la melodía de Heidi... ahora también tienen un mayordomo, que no sé ni qué pinta ahí. No, si va todo genial...
-Han vencido a Hambre.
-Temporalmente. Y no sabemos nada de Mel y Zoe. Si esas niñas han muerto...
-Esto...
-¿Qué?
-Miau...
-¿Qué?
-Miau...
-¡¿Qué?!
-Purrrr...
-¡No me vengas con jodiendas de que no sabes hablar cuando llevas todo el rato haciéndolo!
-Iban a morir a manos de Guerra. Eran las últimas de su grupo que quedaban vivas.
-Lo sé.
-Decidí intervenir.
-¿Acabaste con Guerra?
-Emm... no exactamente...
-¿Qué hiciste?
-Miau...
-Vuelve a maullar y retomaré la idea de Rebeca de caparte.
-Les lancé un hechizo de apasionamiento.
-Te mato.
-Piénsalo. Era la única manera de que sobrevivieran...
-¿¡FOLLANDO CON GUERRA!?
-La verdad es que los tres estaban más que dispuestos...
-¡Te mato!
-Además, los tres son bisexuales... y les gustan las armas... y tienen mucho en común... y...
-Ónice, ¿cuánto durará el hechizo que lanzaste?
-Le quedan unas dos horas.
-Hay que enviar allí a un grupo de rescate. No vaya a ser que se disipe el hechizo y Guerra retuerza el cuello tanto a Mel como a Zoe...
-¿A quién vas a mandar?
-Lo echaré a suertes. Total, así es como funcionan las cosas aquí... parece que esta historia la escribieran una jauría de mandriles borrachos...

Continuará

domingo, 6 de enero de 2013

47 centenas de millar

-¿Cómo que se ha ido sin más? ¿y quién me va a pagar a mi todo esto?- bramó Laurita.
-eeeh... buenooo, todas esas paredes y cristales por el suelo han sido cosa tuya...- intercedió Alba poniendo cara de inocente.
-Si piensas que yo me voy a hacer cargo de todo esto vas lista, que quien atrajo al bicho hasta aquí fuiste tú -dijo Laura resentida-. Ambrosio, ¿acaso he roto yo algo de todo esto?- enunció con esa voz melosa que tan ponto usaba para sonsacarte dinero como para anunciarte una corbata hecha a base de soga.
-No mi señora.
-¿Lo veis?
-En la vida nada es verdad o mentira, todo depende del cristal con el que se mira- añadió el androide.
-Pero si yo no... yo... venía a avisar de q...- se intentó excusar Alba.
-Me estaba atacando cuando su bola de fuego me salvó y...- intentó argumentar Fran.
-Eso no es importante -interrumpió Rebeca-, el hecho es que se ha ido, ha huído de nosotros para evitar que lo derrotáramos; tenemos que estar unidos y...
-¿Que no es importante? aaah, claaaaaro, como no es la casa de la señoritaaaa ya no es importanteeee. ¿Y quién trajo al bicho ese hasta aquí entonces? ¿fuiste tu, Fran? ¿o acaso todo esto es alguna alucinación de las tuyas que nos está volviendo locos a todos?
-Algo de eso hay, creo que de entre todos es el que mayor poder mental tiene, según el viejo maestro- terció Rebeca.
-¿Yo? ¿poder mental?
-¿Él? ¿poder mental? me parto y me mondo...
-Un gran poder conlleva que tu tío se muera, porque sin culpa no hay responsabilidad que pueda entender un adolescente.
-Ya está el robotejo diciendo memeces.
-Y por lo que se ve tu eres una bruja de primera- dijo Raoul con sorna.
-¡Más blanco no se puede!
-¡Bruja tu padre!
-¡No nombres a mi padre! ¿por qué todo el mundo habla mete en las conversaciones a mi padre? ¿acaso no...
-¡Fue un gran día! sólo se oía el entrechocar de escudos cuando cien banderas cayeron sobre las cabezas de sus defensores, y la sangre fluía alrededor como agua y en todas partes estaba la muerte y en ninguna la retirada- citó Arturo
-¡Furcio, más que Furcio! ¡sueltas más aceite que...
-Si, a veces el pobre empieza a hablar sólo, muchas veces no le sigo...
-Pues yo creo que si... ¿está el cyborg citando Ivanhoe o son cosas mías?
-Niñooos niñooos, a pelear al patio, mamá Rebeca os preparará galletas para lueg...
-¡Fulana, ramera creída! ¡si no fueras una niña te...
-...yo afirmo que aceptará limpiamente cualquier honorable desafío. Si pudiera mi pobre garantía añadir la seguridad a la estimable prenda de este santo peregrino, yo empeñaría el nombre y la fama en que dará a este altivo caballero el encuentro que desea.
-Ummm pues no he leído Ivanhoe, Fran ¿seguro que no es algo de Shakespear?
-¿qué se habrá creído ese estúpido?

-¡SIIILEEEEEEEEENCIOOO!- gritó mentalmente el viejo sabio. Esperó unos momentos hasta que a todos dejó de pitarles los oídos y que pudieran levantarse del suelo donde menos Raoul, Rebeca y Alba habían caído retorciéndose de dolor antes de volver a hablar-. Eso está mejor. Lo diré una vez y no lo voy a repetir. A partir de ahora seguiréis a Rebeca y a Raoul y nunca nunca nunca os separéis en grupos menores de tres individuos. En caso de...

-¡Me pido al Androide!- se adelantó Raoul
-¡Mierda! pues yo escojo aaaa... a... a la tipa enfurruñada.
-¡Enfurruñada tu tía!
-¡Somos sabios, esto no es un patio de colegio!
-Tranquila, tengo trapos sucios del señorito aquí presente para compartir contigo ¿amigas?
-¡Me apuntooo!
-Cabrona manipuladora... en fin, escojo a Fran
-¿Ese sosainas? ¡no vale un duro! si lo sabré yo, que lo he metido en mil berenjenales... tía, escoge al borracho.
-¿ese? ni de coña
-Aysss tía tía tía, coge al borrachoo! ¡coge al borracho!
-¡Tu calla! ¡ya te ajustaré cuentas a ti bribón!
-Ñeñeñeñeñe
-Escojo entonces a Al...
-¡¡ESA ni de coña!! ¡yo no hago equipo con la gorda pelandrusca!
-Ñeñeñeñeñe
-Argh ¿pues sabes que? que escojo a Ambrosio. Al menos no nos va a dejar tiradas ni nos va a engañar ni a...
-¡Pero no es un sabio y lo sabes! ¡no sería justo!
-¿Hablas tu de justicia, listillo? ¡andacagaralaría!
-Pues allá ustedes, Alba pa nosotros... y el borracho para ustedes mwahahahahhaha ñeeeeñeñeñeñe jajajajjaja
-¡Mier...! argh, espero que al menos el viejo tuviera razón

-¿Habéis dejado ya de pelearos como críos? bien, ya que los grupos están hechos y parecen equilibrados, el de Rebeca irá a por Codicia y el de...

-¡Codicia es mío!
-¡Deja las cosas personales a un lado, estúpido mocoso! ¡nos jugamos más qu...
-¿¡Qué sabrás tu de cosas personales!? ¡seguidme vosotros, nos las apañaremos contra ese...!
-Busque, compare y si encuentra algo mejor, cómprelo
-Míralo, se cree que ha hecho un buen grupo... pero nosotras somos mejores ¿verdad?
-Eh...
-¿verdad?
-Uhh....
-aysss, si ya sabía yo que el chuloplaya era la elección buena, me tuve que quedar con la reprimida, el lacayo y el borracho...
-¡Fuiste tu la que no quería que metiéramos a Alba! ¡con ella en nuestro bando hubiéramos sido la leche!
-¡Estoy yo! ¡ya somos la leche! ¡gracias a MI, clarostá!
-¿leche? pues ahora no me vendría mal, tengo una tranca encimaaaa...
-¡Ays la madre! la que me ha caído encima...

46 (millones)

-Rebeca, ¿estás bien? -la voz del anciano profesor sonó en su cabeza.
-Bueno, ahora mismo tengo más hematomas que piel, pero para lo que pudo haber sido... estoy bien.
-Raoul me ha puesto al tanto de lo que ha ocurrido. Estoy visionando la pelea mediante un conjuro flashback. Estoy orgulloso de ti. ¿Cómo están los demás?
-Los niños están aterrorizados, pero bien. La pijita está desmayada, imagino que por la tensión de acumular tanta energía. Otro de los chavales está vomitando, pero es por una borrachera de campeonato, nada que ver con los Jinetes del Apocalipsis. El cyborg está inmóvil y de vez en cuando suelta una frase sin sentido. En cuanto al mayordomo, no estoy segura de si le ha dado un infarto... 
-Quería hablarte sobre ese chaval que está vomitando. 
-¿Qué?
-Se llama Adrián. 
-¿Y?
-Es importante.
-Y tanto. No habido visto tamaña embriaguez en todos los años que llevo en esto desde que me nombrasteis "Sabia".
-No, no lo entiendes. Es uno de los nuevos Sabios.
-Será coña.
-No. Durante el combate, Hambre resbaló varias veces en su vómito. Es una de las razones por las que estás viva. Y una de las botellas que rompió fue un whisky añejo, que contenía la esencia de un duende que se ahogó en la barrica de donde proviene. Su esencia mágica debilitó la energía de Hambre. Además, el simple hecho de estar borracho en una pelea contra un Jinete del Apocalipsis, ya es un claro hecho que...
-Me duele un montón la cabeza tras la pelea... no puedo seguir...
-Es otro de los Sabios.
-¿De veras que no es coña?
-No. Tiene el poder... de la Suerte.

Continuará


sábado, 5 de enero de 2013

45 le-grados en otros tantos abortos

Maldición, se habían juntado demasiados, o por lo menos, había llegado aquella tía de armas tomar; a ella sola o a los demás solos los hubiera derrotado fácilmente, pero juntos... y tampoco contaba con el potencial mágico tan enorme que tenía la criaja de las narices, le había pillado desprevenido en aquel combate completamente que estaba planteando desde el lado físico y descuidó el lado astral, sin defensas ni escudos mágicos que entorpecieran su concentración y movimientos. Realmente aún no había visto potencial mágico a tener en cuenta en los sabios que había seguido hasta ahora, esta generación parecía un poco descuidada en ese aspecto, así que se dijo que lo anotaría mentalmente para más adelante. Ahora necesitaba reunirse con algún otro caballero del apocalipsis, ni siquiera él podía con tantos sabios a la vez, por muy cutre que fuera su adiestramiento. Y a simple vista estaba que tanto la chica esta como el tarzán que llegó por último si que parecían sabios de verdad. De hecho, el tiparraco apestaba de un modo familiar... de algún modo sabía que no era de fiar. Y había algo más, una presencia intangible e inquietante, un destello fugaz de un recuerdo, era alguien reconocible y poderoso, una comunicación telepática se había producido justo cuando huía de entre los escombros de la última pared del puñetero edificio. Cuando acabara todo aquello lo derribaría y haría sacrificios sobre sus cenizas. Intentó contactar mentalmente con los otros tres: Guerra estaba apagado o fuera de cobertura, lo cual era extraño en él; Codicia desde que se había cambiado el nombre siempre estaba ocupado, siempre maquinando sucias argucias para conseguir poder y notoriedad, pero el poder de los hombres y la fama de estos, cosas las dos que le parecían sucias y carentes de sentido para alguien como hambre, tendría que insistir mucho antes de que le contestara y mucho más para que le hiciera caso, así que quedaba Muerte... quien sabe qué estaría planeando Muerte. Siempre era una incógnita. Era el caballero más paciente y menos impulsivo, era el más tranquilo y alejado de todo y de todos. Sin embargo era una auténtica fuerza de la naturaleza, un ser tan poderoso e irresistible, era imposible huír de él. Era el fin de todo y de todos, y lo sabía, y sabía jugar sus cartas, y sinceramente, nunca ninguno de los otros tres habían medido sus fuerzas con Muerte, así que era imposible saber si podría ser derrotado. Pero incluso así, se debía a una causa mayor como todos nosotros, el apocalopsis no podía ser ignorado. Intentaría convencer a Muerte primero y luego los otros dos tontos les seguirían a donde fuera.

44 grados

Ambrosio, Alba y Francisco agarraron a Adrián y corrieron a ponerse a cubierto tras una mesa de roble macizo que servía de improvisada trinchera.

Al otro lado de la madera, Arturo había convertido su brazo derecho en un poderoso fusil de asalto y disparaba ráfaga tras ráfaga de balas explosivas contra Hambre, al tiempo que cantaba con un extraño sonido carente de expresividad y sentimiento "Paquito el Chocolatero"... Un raro efecto el conseguido con los "¡hey!" seguidos de sus correspondientes explosiones.

-¿Qué es eso? -preguntó llorando histérica Alba.
-¡No lo sé! -respondió Francisco- ¡Lo has traído tú!
-¡No me refiero a Arturo! ¡Me refiero al otro bicho!
-Creo que es el mendigo del parque... pero... realmente... ¡es un Nazgul!
-¿Qué? ¿Cómo...? ¿Y Laura? ¿Ha sobrevivido?
-¡No lo sé! ¡No la veo!

Hambre logró llegar hasta Arturo, lo alzó en volandas y lo lanzó contra el mueble de las porcelanas. Las cerámicas por valor de miles de euros se hicieron añicos. Arturo comenzó a incorporarse mientras decía:
-Bienvenidos a "Saber y Ganar"...
Y un rayo láser fue disparado desde sus ojos de cyborg hasta donde se encontraba Hambre... que consiguió esquivarlo.

Lástima que no pudiera decirse lo mismo del cuadro original del siglo XVII que fue incinerado al instante. Hambre contraatacó lanzando la televisión de plasma contra la cabeza de su enemigo.

Justo cuando el Jinete del Apocalipsis se preparaba para rematar a Arturo, una naginata estuvo a punto de rebanar su cuello.
Rebeca lanzó un grito de guerra y comenzó a descargar una soberbia serie de golpes contra Hambre... que no tuvieron demasiado efecto.

El Jinete del Apocalipsis utilizó la minicadena como improvisado garrote (de mini, más bien poco) y logró aturdir a Rebeca. Alzó sus garras y...

-¡BASTAAAAAAA! ¡HIJODELAGRANPUTITAAA! ¡BASTAYAAAA! ¡QUEMETASJODIENDOLACASACABRONAZOOOO!

Laurita estaba envuelta en un halo de energía chisporroteante y sus ojos brillaban rojos como el mismo fuego del infierno. Hambre quedó desconcertado. Y más aún cuando en las manos de Laurita se formó una gigantesca bola de energía que salió disparada contra Hambre, haciéndolo atravesar paredes y más paredes, hasta perderlo de vista...
-Volando. Volando. Siempre arriba -dijo Arturo.

En ese momento, Raoul entró de un salto en escena, enarbolando dos pistolas automáticas.
-¡He venido a rescataros! -gritó heroicamente.

Todo el mundo le miró con el ceño fruncido.
-Mi destino es llegar tarde-tarde -sonó la voz robótica de Arturo.
-Hala, a cagar... -bufó Raoul de malhumor.

Continuará
 

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

Creative Commons License Blogalaxia BlogESfera Directorio de Blogs Hispanos - Agrega tu Blog Top Blogs España